El Petapulpo serepa mufando los ñuseso

Queridos compañeros buscadores de la playa de Salamanca. Lamento haber tardado tanto en escribiros pero cuando leáis la extraordinaria historia que os tengo que relatar... quizá entendáis aún menos, pero seguro que lo comprenderéis mejor.

Como si fuera la cosa más normal del mundo, caminé por una serie de grutas guiado en la oscuridad por mi pétreo guía, El Moai. El cual era de carácter áspero y tosco... como cualquier otra piedra... El caso es por fin salimos a una cueva en la loma de una gran montaña.
La luna estaba llena aunque no se muy bien de qué, y mi colega me dijo que debíamos hacer un alto. ¿Le  pregunté que si estaba cansado? Y me contestó: "No, soy duro como la piedra". Hice un pequeño fuego de campaña para pasar la noche y calenté un poco de comida. Cené frugalmente y me acosté cerca de la hoguera...
-¿Por qué no me dices quién soy Moai? ¿Y qué es lo que he hecho para caerte tan mal?
-Porque no te lo mereces. Porque si te lo digo, volverías a ser el mismo capullo integral que antes. ¿No lo entiendes? Tu mente ha sufrido un reseteo. Es un auténtico milagro. Una segunda oportunidad que casi nadie tiene en la vida. No puedo decirte quién eres, para que no vuelvas a ser el que eras.
Su manera de expresarse me hizo pensar en una cosa. Me fijé en la estatua, que estaba con la mirada fija en las estrellas y le pregunté.
-Eres una chica, ¿Verdad?.
-Si. Cállate y vete a dormir. Y no le mires a los ojos...
Le hice caso y cerré los ojos y caí en un profundo sueño.

Soñaba con una caverna gigantesca, estaba anegada de agua y en el centro había un enorme monolito con inscripciones extrañas en un idioma arcano. Brillaban en la oscuridad con una luz blanca azulada. Y encima del monolito había un enorme y titánico pulpo del tamaño de un rascacielos, de ojos salones inyectados en sangre. En uno de los tentáculos tenía un truja del tamaño de un zeppelin. Dió una enorme calada y expulsó el humo creando una densa neblina. Entonces me miro. Me miró como el que mira el envoltorio arrugado de una chocolatina flotando en un estanque...  me miró como a una colilla tirada en la playa... la playa... ¿De Salamanca?
Todas estas sensaciones me venían a la cabeza mientras miraba a los ojos del inmenso octoporro que tenía en frente. En el ojo izquierdo estaba el alfa, y en el derecho el omega... en el primero el espacio, y en el segundo el tiempo. En uno el principio y en otro el fin. Lo femenino y lo masculino, lo dulce y lo salado, la tristeza y la alegría..., el pan y el vino... ¿el ron y la cocacola?... ¿¿el ketchup y la mostaza??....  ¿¿la carne y el pescado...?? ¿¿¿...El fútbol y el baloncesto...??? ¿¿¿¿...Mac y Windows...??? ¿¿¿...Mear en el desierto y cagar en la Antártida...???

"En su vernaca rratesubnea el petapulpo serepa mufando los ñuseso. Se muy bien quién eres hombre misterioso. Un hombre que tiene el cerebro y las ideas más liadas que un cubo de rubik de de 200 cuadrados... Tu amnesia ha sido un regalo del destino... Si tienes la fuerza de voluntad necesaria, podrás librarte de todas las cargas que te hacían fracasar una y otra vez..."
"¿Fracasar en qué...?" Pregunté.
"En tu búsqueda. Estabas tan aterrorizado ante la idea del fracaso que perdías el tiempo preocupándote y asustándote en vez de seguir buscando. Te dolía tanto no tener lo que anhelabas que se te olvidaba lo si que tenías y se te escapaba de entre las manos. Tus pensamientos determinan tus acciones. por eso, mientras más pensabas en que algo malo te iba a pasar, más posibilidades había de que te pase... Te dejabas guiar por el miedo... te dejas guiar por la desesperación y la tristeza... por eso fracasaste una y otra vez".
"Si siempre estaba preocupado... fuera lo que fuera que estaba buscando... no podría concentrarme... estaría siempre distraído... ¿no?".
"Exacto..."
"¿Conseguiré recuperar la memoria...?" Le pregunté al cefalópodo porreta.
Pero en respuésta me lanzó una nube de humo, que anegó por completo la estancia.

Me desperté sobresaltado. Era de noche todavía y mi compañero pétreo estaba enfrente de mi... mirándome con los ojos brillando rojos como brasas en la oscuridad.

-Has soñado con el Petapulpo... -asentí en silencio con la cabeza-. El es el antiguo cefalópodo que vive en la caverna submarina de la playa de Salamanca. Es una criatura multidimensional... por algo te dije que no le miraras a los ojos... El lo ve todo... puede ver el pasado, el presente, y los posibles futuros...
-¿Por qué no me ha respondido...?
-Porque fueron ese tipo de preguntas las que te hicieron fracasar una y otra vez... Basta por hoy.

Esto ha sido todo hasta hoy compañeros buscadores. Seguiré en contacto con vosotros.



Un botellazo:
  1. A veces no es tan importante saber quién es uno. Por eso renegué de mi nombre. Quien eres lo dicen tus acciones, tus objetivos, tu color favorito de pared para el cuarto de baño.
    Seguiré de cerca tu historia, Hombre Misterioso.